26 enero, 2014

El País: mentiras y estadísticas

Se atribuye a Disraeli el aforismo: Hay tres clases de mentiras: mentiras pequeñas, mentiras grandes y estadísticas. Parece que Sir Benjamin ya se olía lo que podía suceder si no se era cuidadoso; aunque, más que el cuidado, imprescindible, en su elaboración: muestra correcta, hipótesis bien construidas, elección de la herramienta adecuada en cada caso..., la mentira, la maldita mentira, se produce a la hora de interpretar los resultados.

Los trucos para burlar a la verdad matemática son variados. El primero es el de afirmar que una "cosa" ocurrirá porque un estudio estadístico así lo prevé; esto es tremendamente peligroso, pues los resultados de un trabajo estadístico siempre deben ser vistos en términos de probabilidad, es decir, que esa "cosa" es más, o menos, fácil que suceda. Otro truco, el más usado, consiste en retocar las escalas de las gráficas para que las diferencias pequeñas parezcan grandes, o al revés. Esto se utiliza frecuentemente cuando se presentan resultados del tipo que sea y estos son pobres.

Políticos y prensa interesada son maestros en el arte del maquillaje. En este ejemplo puede verse con claridad. Corresponde a un sondeo que publica hoy El País. Este es el gráfico de los resultados de intención de voto de los diferentes partidos que Metroscopia elaboró para El País. De él pueden desprenderse algunas conclusiones:

1) La abstención va a ser muy alta: más del 55% de los electores no acudirán a votar
2) Los grandes partidos, PP y PSOE pierden alrededor de 15 puntos porcentuales
3) Los votos que pierden los grandes se reparten entre otras formaciones (IU, UPyD, ...), que adquieren mayor relevancia
4) Parece que hay una pequeña diferencia favorable al PSOE respecto al PP, pero no es significativa, pues el margen de error de los resultados es mayor que ella (la ficha técnica de la encuesta fija un margen de error de 2,9 puntos)

Las estadísticas hay que mirarlas así, con frialdad, so pena de equivocarse en la predicción. Sin embargo, en ocasiones interesa señalar determinada información aunque hacerlo sea una temeridad y delate intereses espurios.

Esta es la gráfica que El País presenta en la edición digital. Personalmente me parece vergonzoso porque constituye un caso flagrante de crear opinión interesada y sin base alguna.

El titular de portada es : El PSOE toma ventaja al PP de cara a las elecciones de mayo. Cuando se pincha en la noticia aparece el gráfico de la izquierda en el que se aprecia una ventaja del PSOE del 1,6%; el resto no importa, ni el resto de partidos ni el del propio gráfico, en el que lo mas notorio es la pérdida de 15 puntos de ambos partidos. Aquí el titular es: El PSOE aventaja al PP en las europeas. Solo cuando se pincha en el gráfico, aparece la información completa, y cuando se le echa un vistazo es cuando uno se da cuenta de cómo se puede manipular una estadística y convertirla en una maldita mentira.

Puedo decir que soy suscriptor de la edición digital de este periódico y siento verdadera vergüenza por la falta de rigor a la hora de interpretar un sondeo. El autor, o los autores, del trabajo incumplen de manera flagrante el libro de estilo del diario. Dudo que este tipo de prácticas sean buenas para El País. El servilismo a un partido político siempre termina por pasar factura.

3 comentarios:

Bond dijo...

Los medios de comunicación y la mínima ética hace mucho tiempo que han tomado caminos cada vez más divergentes

Unknown dijo...

Hace tiempo que el País ha dejado de ser lo que era.

Luis dijo...

Pero señor, su indignación con el citado informe en el órgano servil conocido como El País, trae a la mente la "indignación " del jefe de policia Renault en la película Casablanca cuando este declara su estupefacto que existe juego de apuesta en el café de Rick.

Seguro que no querrá usted decir que está sorprendido de que la grande prensa como El País tiene la misión de informar la verdad. La misión de Rick Blaine en Casablanca era de intoxicar a sus clientes con alcohol asequible, y la del Capitán Renault, de no ver nada de ilegal en el lugar donde cobraba linda mordida.

Prensa principal servil está en el negocio de no retirar el estado de embriaguez de un país. Es el modo de así atender las preocupaciones de los sectores comerciales que generan sus ingresos publicitarios (no hacen dinero con su escasa suscripción). Eso, y mantener relaciones cordiales con los políticos y los poderosos detrás de los políticos. Esto siempre con el fin de tener y mantener con los elites, el elemento más importante que considera tal prensa: abierto acceso a ellos. El resto es espectáculo para las masas ingenuas. Eso, y las estadísticas.

Luis de Agustin