04 julio, 2012

Qué se haga justicia

Lo que se hizo con Bankia, con las cajas en general, por parte de quienes tuvieron responsabilidades en ellas a lo largo de estos años de especulación galopante y de gasto sin sentido solo tiene un nombre: estafa nacional. Se estafó no solo a los clientes y depositarios sino a todos los contribuyentes que, de una u otra manera hemos pagado y vamos a seguir pagando la refinanciación de las entidades.

La responsabilidad de los partidos políticos, sindicatos y profesionales de la banca que dirigían y que dirigen estos casinos es mucho más que política o económica, la responsabilidad es, y si no lo es tiene que serlo, penal. El robo, la estafa y la extorsión son un delito penal, y mucho más cuando son colectivas, es decir, no solo a personas concretas, sino al conjunto de los habitantes de un país.

Parece increíble que el esclarecimiento de un delito de este calibre no haya sido puesto encima de la mesa de un juez por ningún partido o sindicato hasta hace solo unos días. Pero España es así. Partidos y sindicatos hicieron la vista gorda porque, en este asunto estaban implicados ellos mismos por la parte que les correspondía en los consejos de las Cajas de Ahorros.

Que UP y D haya decidido denunciar ante la justicia el caso Bankia solo se explica desde la seguridad que esta formación tenía de estar limpia al no tener militantes dentro de los consejos. No sé que hubiera pasado si los hubiesen tenido, pero el caso es que dieron el paso y lo hicieron. Se abrió la caja de los truenos.

Pero este asunto no puede quedar en una simple imputación de algunos responsables. En este asunto debe llegarse hasta el fondo. En toda esta maraña debe escarbarse en el pasado hasta que todo quede completamente aclarado. El pueblo soberano tiene sed de justicia y esta debe prevalecer.

El gobierno, el parlamento y quien tenga que intervenir, deben hacerlo con contundencia para crear leyes que fuercen a todos los que se enriquecieron a la sombra de este monumental engaño mediante el cobro de bonus, prejubilaciones, indemnizaciones, o lo que haya sido, a devolver el dinero al contribuyente. Hasta el último céntimo. Y todos los que por su responsabilidad tengan que ir a la cárcel, deberán acabar allí.

De no ser así el aparato del estado, el entramado político social que soporta nuestra sociedad estará bajo sospecha por omisión. Atentos los agentes sociales a esto. Llegó la hora de mirar debajo de sus propias alfombras y de visitar por una temporada las celdas para muchos. Los que sean. No importan los nombres ni la relevancia. Tiene que hacerse justicia para que este país pueda mantener la frente alta.

1 comentario:

Luis dijo...

Si, Sr. autor, pero el escándalo es peor, muchísimo pero. La canciller alemana, Angela Merkel, bajo enorme precsion, por fin accedió a la modificación de un plan de rescate permanente de la recaudación de la zona euro (pero que rescata en realidad a los inversores de los bancos multinacionales y casas inversoras). Además de aliviar las condiciones en que los rescates se dan, en las concesiones se incluía un acuerdo de que los fondos destinados a los gobiernos endeudados podrían ser canalizados directamente a los bancos estresados. Las concesiones significa que el fondo de rescate de la zona euro (respaldada por el dinero de los contribuyentes) se toma de una participación en los bancos en quiebra. Riesgo se ha incrementado. Los contribuyentes alemanes han incrementado sus pasivos. En el futuro un accidente de banco no caigara sobre los hombros de los tesoros nacionales, pero en el Mecanismo Europeo de Estabilidad (ESM), un fondo al que Alemania aporta más. En el corto plazo, estas medidas aliviará la presión en los mercados. Sin embargo, existe en la actualidad sólo 500 mil millones de euros asignados a la ESM. Eso puede ser devorado rápidamente y los mercados pueden exigir más. Aún no está claro lo profundo de los agujeros dentro de los bancos de la eurozona (ya que el miedo a que se sepa la realidad, aterroriza a los políticos - servidores de los grandes capitalistas.

El ESM es ahora un fondo permanente de rescate para los bancos privados, una especie de permanente "bienestar para los ricos." No hay ningún límite máximo fijado en las obligaciones de ser suscritos por los contribuyentes, no hay espacio para negociar, ni a ningún recurso en los tribunales. Sus disposiciones de enormes proporciones es que el tratado establece una nueva organización intergubernamental a la que estan obligados a transferir los activos de un número ilimitado de un plazo de siete días si así lo solicita un banco privado, y que si no fuese poco, dicho banco u organización puede demandar, pero, es inmune a todas las formas de persecución y cuyos responsables gozan de la misma inmunidad. No hay revisores independientes y no se aplican las leyes existentes. Los gobiernos no pueden actuar en contra de ella. Los presupuestos nacionales de Europa estan en manos de una única organización intergubernamental que no electo.

Esto tiene nombres, dictadura (?) y es bastante mas malévola de la conocida, ya que es organizada y defendida por los mismos gobiernos democraticamente elegidos.

Mejor dejar aquí el comentario de manera escéptico, que darle mas nombres a este proceso de traición, rinde el dialogo.

Luis de Agustin