27 mayo, 2012

Eurocopa 2012. Adiós a la crisis

Dentro de unos días va a dar comienzo la Copa de Europa de selecciones nacionales. Y mientras dure, o mientras la Selección Española esté en competición, todo el mundo estará en nuestro país como anestesiado. Los informativos abrirán con fútbol, los periódicos hablarán de fútbol y en la calle solo el fútbol será objeto de comentario.

Durante esos días se olvidará todo, como cuando el Emperador romano decretaba juegos para entretener al pueblo: pan y circo. Pan y circo es lo que vamos a tener durante unas semanas. Pan que nos hará olvidar el hambre que pasamos y circo que nos ayudará a no pensar en nada. Aunque la prima de riesgo, los mercados, los bancos y cajas vacíos y las bolsas convulsas sigan estando ahí.

No sé si España ganará, o no. La verdad es que me importa un bledo. Si España es de por sí, y gracias a sus gobernantes, un asco, que voy a decir del fútbol español. Un mundo manejado por macarras que tiene una deuda enorme con al estado, pero que le es permitido pasársela por el arco del triunfo. Por qué tengo que desear que gane la Selección. ¿Es antipatriótico no tener ese tipo de anhelos?

Si la Selección gana, el fútbol sale reforzado y se meterá más dinero, o se perdonarán deudas, qué se yo. Pero si cae eliminada a las primeras de cambio, al menos nos vamos a ahorrar una pasta y posiblemente se deje de mostrar interés por un deporte bellísimo de por sí, pero capitalizado por desalmados e ignorantes que, a su vez, traslada la ignorancia a todas las capas de la sociedad.

Madrid o Barcelona, Sevilla o Betis, España o cualquier otra... Qué importa quien gane o pierda. ¿Es que el imbécil que se baña en La Cibeles o en cualquier otra parte va a tener cambios en su vida? ¿Va a encontrar trabajo si está en paro? ¿Le van a pagar más si le pagan poco? Nada de eso: el pobre imbécil solo consume una dosis de anestesia que le haga olvidar lo putas que las pasa... Así andamos.

26 mayo, 2012

Bancos: qué va a hacer ahora la gente

Qué vamos a hacer ahora quienes tenemos una edad complicada, entre 50 y 60 años, o más, y tenemos los ahorros de toda nuestra vida repartidos por la geografía bancaria española. Nuestros depósitos en los bancos españoles peligran no se sabe por qué. Pero, casi sin darnos cuenta podemos encontrarnos sin nada.

Cuando llevas el dinero a un banco te ofrecen cosas: plazos fijos, pagarés, preferentes, fondos. Todo con distintas rentabilidades y con distintos nombres, pero que para el común de los mortales significan poco o nada. Eso sí, te hacen firmar unos papeles en los que, con toda seguridad, en caso de problemas el que pierdes eres tú, no ellos.

Un día sí y otro también nos despertamos con noticias desalentadoras que nos llenan de inseguridad. Algunos ya ni se despiertan, directamente no duermen. Millones de personas fueron, y son, engañadas por los bancos y no pueden, no podemos, hacer nada. Solamente esperar y sufrir, porque, rezar tampoco creo que sirva de mucho... Los dioses de las finanzas no escuchan oraciones, solo el tintineo de las monedas que caen en su saco.

Qué vamos a hacer si el sistema se va a la mierda. A los jóvenes les queda su fuerza para trabajar y salir adelante, pero a los que nos vamos haciendo viejos no nos queda ya fuerza para volver a empezar de cero. Si esto se va al traste, toda nuestra vida de esfuerzo y sacrificio no habrá servido para nada. Habremos estado en este mundo solo para hacer el gilipollas.

Y lo peor de todo es que no tiene solución porque, si consigues sacar el dinero de un banco, lo único que te queda es llevarlo a otro. No puede guardarse el dinero en casa, en el colchón o debajo de una tabla, porque tampoco existe la garantía de que no te lo roben, o de que no cambien la moneda y no te sirva para nada... Qué se yo...

Pero, por favor, en nombre de los ciudadanos de a pie, que alguien ponga orden en esto y se garantice que la gente recupere al menos lo que invirtió, que los depositantes no son especuladores, son personas engañadas por un sistema que ofrece productos envenenados. Los depositantes no son responsables de sus actos. Son como niños a quienes se ofrece un dulce, lo van a coger, y si tiene veneno y el niño enferma o se muere, nadie puede culpar al niño por haberlo cogido. El responsable es el que se lo ofreció.

22 mayo, 2012

El problema de la educación

Primer principio: la inversión en educación y en investigación es básica para el avance de un país.

Sin embargo, así como la investigación en España siempre fue el garbanzo negro, con una inversión estatal muy por debajo de la media de la Unión Europea (ya comentado en este blog), el gasto en educación no sigue la misma pauta.

Entiendo que los ciudadanos se preocupen por los recortes en educación, pero creo que también es para preocupar que los resultados de España en las evaluaciones de nivel educativo (informe Pisa) sean claramente inferiores a la media europea y, sobre todo a otros países con similares ratios para lo que se considera básico para una buena educación: alumnos por profesor, alumnos por aula y, yo añadiría, salario de los profesores.

Alumnos por profesor.

Según el informe "Panorama de la educación, indicadores de la OCD 2011, informe español" publicado por el Ministerio de Educación, los datos para este indicador están en un nivel similar al de los países más adelantados de nuestro entorno.


Infantil Primaria Secundaria 1 Secundaria 2 Terciaria
España 12,1 13,3 10,1 9,3 11,6
UE 21 12,9 14,5 11,5 12,4 15,5
Francia 19,7 19,7 14,9 9,6 15,6
Alemania 10,6 17,4 15,1 13,9 11,5
Finlandia 11,2 13,6 10,1 16,6 14,9
Suecia 6,2 12,1 11,3 13,2 8,8


Esto quiere decir que si el número de alumnos por profesor es un indicador válido, nuestro nivel educativo debería ser similar al de los demás. ¿Lo es? Puede, entonces, que haya algo de margen para subirlo un poco sin perder "calidad".

Alumnos por aula.

Según el mismo informe nuestras aulas están "menos llenas" que en otros países con mayor excelencia educativa.


Primaria Secundaria 1
Ed. Pública Ed. Privada Ed. Pública Ed. Privada
España 19,8 24,5 23,5 25,8
UE 21 21,4 20,5 23,5 22,8
Francia 20 19 24,3 22,8
Alemania 21,7 22 24,6 25,2
Finlandia 19,8 18,4 20 21,7



Creo que tampoco en esto estamos tan mal y aunque se suba un poco, en la educación pública, todavía estaremos en el buen nivel.

Salario de los profesores.

Un profesor más motivado educará mejor. Veamos el salario de nuestros enseñantes en comparación con los de su entorno europeo. La retribución está en miles de euros convertidos mediante PPA (paridad del poder adquisitivo)


Primaria Secundaria 2
Retrib. Inicial Máxima en escala Retrib. Inicial Máxima en escala
España 35907 50105 40923 57304
UE 21 26472 42041 29472 47740
Francia 21077 43216 24219 45778
Alemania 40780 54249 48942 68157
Finlandia 28704 44305 31382 53636


Nuestros profesores están mejor pagados que los de otros países con mejores resultados.

Podría seguir analizando el informe, pero no merece la pena. En conclusión, qué haya algunos alumnos más por clase o que los profesores tengan que trabajar algunas horas más por el mismo salario no creo que vaya a representar un empeoramiento de la calidad global de la enseñanza.

El problema en España es como siempre la productividad y el grado de implicación en el trabajo. No se entiende si no, de qué modo países como Finlandia han alcanzado grados de excelencia educativa con ratios comparables o peores que los nuestros. Puede que los problemas estén en el índice de vocacionalidad de los profesores o en el grado de involucración de las familias en la educación de los jóvenes. Pero, desde luego no está en los alumnos por clase, ni el los alumnos por profesor ni tan siquiera en el salario de los profesores.

Tendrán que convencernos de otra manera y sobre todo explicarnos por qué, con estos números, el índice de fracaso escolar en España está en el 30%, más del doble de la media de la UE. Esto es lo que hay que explicar a la sociedad y no entretenerla con bagatelas como que unos pocos alumnos más por clase van a derrumbar la calidad educativa de un país que ya la tiene en el subsuelo.


19 mayo, 2012

La feria de la mentira. Intervención de cuentas ya

El gobierno entrante se quejó amargamente de que el gobierno saliente había hecho mal los apuntes contables y nuestro déficit era superior al declarado. El PP se apresuró a decir alto y claro que los socialistas eran unos tramposos y que, además de la "herencia", estaba mal la contabilidad. Eso nos perjudicaba enormemente, pues no podríamos cumplir los objetivos.

El gobierno saliente decía que no, que sus cuentas estaban bien. Pero los números son tozudos, y cuando aparecen, su comportamiento es apolítico. Las sumas y las restas, que de eso se trata la contabilidad, no saben de socialistas o populares. Las cuentas eran falsas. El gobierno saliente había ocultado pufos al entrante.

El gobierno actual, que de entrante ya lleva tiempo, decide poner firmes a las Comunidades autónomas: "qué va a ser esto de gastar como se quiera". A ver si de una vez se enteran los virreyes que no pueden hacer los que les de la "virreal" gana. Pide las cuentas a las comunidades y se encuentra con que la virreinesa Aguirre y su colega valenciano estaban empufados más o menos el un 50% más de lo que decían.

Las comunidades del PP tenían facturas guardadas en un cajón para que no fueran contabilizadas, ni pagadas, claro y así poder dar cuentas maquilladas. Pero los números, como dije, son tozudos, y al final hay que cuadrarlos y, claro, no hay explicación. Esperanza y Fabra engañaron a sus propios correligionarios. Así que no quiero pensar lo que habrán hecho con el gobierno Zapatero.

Me pregunto si todo esto de meter facturas en un cajón y no pagar es legal. Si no debería ir a la cárcel quien lo consiente. Yo creo que sí. Pero lo peor es la imagen de España en Europa. Bruselas no nos cree ni nos va a creer nunca, porque somos simplemente unos mentirosos, unos tramposos, unos irresponsables, unos delincuentes económicos.

Creo que lo mejor que le puede pasar a España es que Bruselas intervenga nuestras cuentas. No ya porque sea necesario para arreglar la economía, sino para conocer la verdad en tiempo real. En España dejas a un político a cargo de un cajón y ni te cuento lo que va a pasar con lo que hay dentro. Vuelvo a decirlo alto y claro: qué vergüenza siento. Por favor,... intervengan nuestras cuentas, los responsables políticos españoles son unos mentirosos.

Vaya un problema que tiene España con los políticos. No hay más que basura por todos los rincones. Y me dirán que no todos son así... Vale, pero, entonces por qué pasa esto. Yo solo veo una salida: dejar de votar en masa para que los partidos reaccionen y empiecen a hacer las cosas de otra manera. No sé... Algo tenemos que hacer los ciudadanos, porque como esperemos que lo hagan esta cuadrilla de maleantes lo tenemos claro.

17 mayo, 2012

Asnos y políticos

El asno, el burro, es un animal cuya población está en recesión, como nuestra economía. El asno tiene fama de ser un animal terco y tozudo. Sin embargo se dice de él que nunca tropieza dos veces en la misma piedra, cosa que le hace una bestia fiable en el trabajo de carga y transporte por caminos difíciles. Además tampoco come mucho y se conforma con un alojamiento sencillo: un poco de paja en el suelo le basta.

El asno es un animal que no sabe estar en sociedad. Cuando hay varios burros juntos, ni se miran. Rebuznan de manera contagiosa y concomitante, como si bostezasen y lo hacen en un tono altísimo que no permite oír más que el propio sonido sin importar el rebuzno ajeno. No saben trabajar en grupo: jamás he visto un carro tirado por más de uno. Cuando un asno no puede más se para y no hay quién lo haga arrancar. Da igual que le hables, que le grites, que le azotes o que le des puntapiés en los cuartos traseros, él no se mueve.

El político es una subespecie parásita de Homo sapiens, Homo sapiens vampyrus, de muy parecido comportamiento al del asno. Su población no disminuye, pero su consideración social está en franca caída, igual que nuestra economía. Como el asno, tiene fama de ser terco y tozudo, pero al contrario que éste tiene el defecto de tropezar infinidad de veces en la misma piedra. Esto hace que sea muy poco adaptado al trabajo de hacer cosas por los demás. Sin embargo sí es fiable haciendo trabajos para sí mismo.

Al contrario que el pollino, el político trabaja bien en equipo, pero sólo con los de su manada. Su naturaleza de mente estrecha hace que se comporte como si los de otros grupos no fueran sus congéneres. Dos manadas de diferente adscripción de esta subespecie son incapaces de entenderse para compartir un territorio o alimentos para sobrevivir. Si la otra manada desaparece, mejor, más forraje para los que quedan.

Su cerebro deformado por la evolución y la endogamia es incapaz de distinguir lo correcto de lo que no lo es. Tan solo procesa aquello que es bueno para él y su grupo. Lo que es bueno para todos no importa, especialmente si lo hacen los de otra comunidad. Porque, aunque el trabajo del Homo sapiens vampyrus era organizar las sociedades de la especie madre, con el paso de las generaciones, se fue realizando una selección de individuos en cuyos genes está inhibida esta faceta.

También necesitan más comodidades que los jumentos: coches oficiales, hoteles y aviones, buena ropa y aparatos electrónicos de última generación. Para ello organizan las cosas para que el resto de los Homo sapiens trabajen para su manutención. Esa parte de la inteligencia es la que tienen más desarrollada. Lo consiguen mediante rebuznos bien entonados que enfervorizan a a sus primos sapiens, que son capaces incluso de matarse entre ellos por las soflamas de grupos enfrentados de sapiens vampyrus.

Otra característica de esta subespecie, la mas notoria, y que fue acentuándose en las últimas generaciones, es que solo son capaces de llegar a pactos entre manadas si el interés de ambas lo requiere. Nada importa el interés de las sociedades a las que organizan y que representan. Este rasgo hace que los Homo sapiens normales lleguen a sufrir recortes de derechos e incluso hambre sin que al político le preocupe lo más mínimo, pues el vampyrus está insensibilizado ante este hecho.

Al igual que el asno, el político emite sonidos guturales, muchas veces sin sentido, cuyo objetivo es inhibir el mensaje de un competidor. Cuando el político emite su rebuzno característico su oído selectivo solo le permite escuchar su propio mensaje. Esta particularidad es clave para explicar la incapacidad de entendimiento con los de otro grupo, y a veces, con los de su misma manada.

16 mayo, 2012



Qué vergüenza siento

Es una sensación horrible. Me veo en el espejo cada mañana y me digo a mí mismo que soy un pobre diablo. Que mi valor como persona es bajo, o muy bajo por no haber sabido hacer nada contra las causas que generaron en mi país esta situación que me hace sentir tan desgraciado. No he sido capaz, como ciudadano de exigir buena gestión, de participar desde la sociedad civil en algún movimiento contra tantos desmanes durante los últimos veinte años,  o de inventarlo si no lo había. No he sabido y me avergüenzo. Y no me consuela nada que nadie lo haya hecho.

Siento vergüenza de los políticos que en todos estos años, al ver lo que se cocía, no hicieron nada por evitarlo, o peor aún, fueron copartícipes de esta orgía de robo, ya no solo  del dinero, sino de la autoestima, de un pueblo como el español. La autoestima es lo único que puede mantener de pie a una persona. Sin autoestima se pierde la dignidad. Nosotros, los españoles, hemos perdido nuestra dignidad  a manos de nuestros representantes que, en teoría, iban a defender nuestros intereses. Nuestros vecinos europeos, el mundo civilizado entero, desconfía de nosotros por mentirosos y tramposos.

Siento vergüenza de un país que va a ser incapaz de hacer pagar con la cárcel a todos los directivos, políticos y no políticos implicados en este caos financiero llamado Bankia, envueltos en este lupanar constituido por todas las cajas de ahorros, a las que se permitió actuar como bancos. ¿Alguien se ha parado a mirar el pelaje de los consejeros de las cajas? Cualquier inculto con filiación política o sindical tenía y tiene una silla en estas cuevas de Ali Babá. Toda esta pléyade ha hecho el agujero negro que nos está tragando con su enorme fuerza gravitatoria. A nosotros, al pueblo, no a los directivos, con sueldos millonarios y jubilaciones doradas, ni a partidos o sindicatos, siempre arropados.

Siento vergüenza de los votantes, que no supieron ver que con sus sufragios alimentaban al leviatán que nos envuelve. Yo también caí. Voté y confié. Qué error, Dios mio. Cómo pude siquiera perder mi tiempo en acercarme a una urna para legitimar a toda esta mafia que lo tenía tan bien organizado en su provecho. Cómo no lo vi. Cómo no lo vimos. Cómo incluso hemos discutido y argumentado hasta quedar roncos por nuestras preferencias y nos hemos emocionado cuando los nuestros ganaban las elecciones. Populares, nacionalistas y socialistas nos llevaron al desastre y socialistas, nacionalistas y populares terminarán por hundirnos completamente en el fango más apestoso. Y nosotros, los ciudadanos, en el medio, en la cola para votar.

España es diferente, sí. Completamente diferente. España es una vergüenza de país. España es vista en el exterior como una mierda, una mierda construida por sus clases mandatarias. España no tiene una sociedad civil poderosa que equilibre las cosas. En España se puede robar, se puede difamar, se puede engañar, se puede incluso matar, o hacer morir, de vergüenza en este caso, con total impunidad. En España solo hay una cosa buena: el pueblo español, que de bueno, apasionado y entregado es fácilmente engañado por los tiburones que se alimentan de su carne y de su sangre.

Nos habéis hecho un daño irreparable. Nos habéis hecho inclinar la cabeza, sentir vergüenza ante el mundo. Pero algún día lo pagaréis, malditos.

07 mayo, 2012


Participación electoral en Francia

La hermosa lección de participación electoral impartida por los ciudadanos franceses deja lugar para la ilusión: la gente se sabe dueña de la capacidad de hacer que las cosas vayan por donde ella piensa que tienen que ir. El 80% de los franceses hablaron ayer, 6 de mayo de 2012 y una mayoría, el 52% de ese 80% dijeron que Hollande debía ser el Presidente de la República. Lo que significa que el Sr. Hollande está respaldado por cerca del 42% del electorado de su país.

En Grecia hubo también elecciones legislativas, pero ningún partido obtuvo una mayoría clara. La gobernabilidad va a ser imposible y la irrupción en el parlamento de un partido neonazi va a complicar las cosas aún más si cabe. Pero el hecho más significativo de estas elecciones es que la abstención rozó el 40 %. Lo que no quiere decir que los griegos no estén interesados en elegir a sus gobernantes, sino que no hay gobernantes dignos de ser elegidos por los griegos.

Las elecciones en Serbia también arrojaron una abstención del 40%. Lo mismo que las últimas autonómicas celebradas en Asturias y en Andalucía. Que el 40% de los ciudadanos decida quedarse en su casa cuando se les llama a las urnas no es asunto baladí. Significa que no hay interés en elegir a quién va a representarles. Pero, ¿es un problema de desinterés repentino, o vagancia por acercarse a los colegios electorales, o es un problema de desconfianza en los candidatos?

La población está más que harta de corruptos, caraduras e incompetentes; harta de que se gobierne para la obtención del voto en lugar de para mejorar la vida de la gente; harta de mentiras y de promesas incumplidas; harta, en definitiva, de que su participación no sirva para casi nada. Por esto no acuden, y cada día acudirán menos, a no ser que se haga algo.

Nada que haya pasado por las urnas y haya tenido una alta abstención está legitimado. Ni gobiernos, ni estatutos, ni leyes vinculantes. Nada. La legitimación en democracia la da la participación. Algunos ejemplos de abstención en España: estatuto catalán 52%, últimas elecciones autonómicas 40%... ¿De verdad lo que salió de esas consultas representa el deseo mayoritario de la población? Pues eso es lo básico en democracia, pero, claro, hay que ganárselo.

En algunos países, como España, la clase política está denostada y se lo tiene bien merecido. Pero solo desde la política se puede recuperar la confianza de los ciudadanos y la vuelta a la participación. Los franceses tienen políticos más valiosos, respetables y capaces que los griegos, serbios o españoles. Si no fuera así, sin ninguna duda, los franceses lo harían saber con una alta abstención. Bendita sea Francia.

06 mayo, 2012

Autonomías o la asimetría del estado

Puede que en este estado tan particular que es España haya áreas que sientan que tienen algún hecho diferencial que las hace distintas al resto. Sin embargo esto no significa que tengan que tener una gestión independiente en su totalidad del resto del estado, especialmente en asuntos económicos y de política exterior. Puede que un catalán, un vasco o un asturiano, como es mi caso, se sienta especial: yo me siento. Pero de ahí a la broma de pensar que puedo ser independiente del estado central y hacer mi política particular, incluso en contra de los intereses o compromisos estatales, va un abismo.

Las autonomías están muy bien en tanto que la cercanía al ciudadano de ciertas instituciones y servicios mejoran su calidad de vida, pero nada más. Lo que no pueden ser desde luego es prostíbulos a medida de políticos acomplejados que quieren hacer de un territorio su territorio. Una autonomía no puede constituir un reducto de poder contra el estado central en el que se refugien los partidos perdedores de las elecciones generales para desde allí hacer oposición periférica activa fuera del control del parlamento central.

La "cagada", con perdón, de Valencia, con Camps al frente, gastando a manos llenas en nada en plena crisis cuando el PSOE estaba en el poder solo por hacer daño electoral al adversario no tiene nombre, o sí lo tiene pero este es un foro con cierta educación. La "cagada" de Castilla - La Mancha, con Barreda al frente, haciendo lo mismo para que se viera que ellos podían ser tan buenos como los valencianos fue también memorable. Ambas representaron batacazos ruinosos que ahora pagan unos ciudadanos boquiabiertos, que en Valencia, increíble, volvieron a votar al incompetente Camps.

Son respetables las diferencias de carácter, lengua. costumbres... España es un estado plural y podría devenir en estado federal. No pasa nada, es más, sería estupendo probablemente. Pero la pluralidad,  la independencia, federal o no, no autoriza a tener una política económica que lleve a un problema serio al resto del estado. Cataluña emite deuda y es basura financiera. En Cataluña, la pela es la pela, pero sus políticos echaron por tierra la confianza en su deuda, cosa inaudita. ¿Alguien entiende por qué Cataluña tiene que emitir deuda? La deuda la emite la economía central, y punto.

Los españoles hemos decidido que nuestro estado es autonómico. Se nos preguntó en referéndum y salió así. Lo que no se nos preguntó fue si estábamos de acuerdo con la evolución del estado autonómico. Las autonomías, como consecuencia de la falta de coordinación entre ellas y con el poder central, han creado un estado asimétrico. Entre todos tendremos que volver a arreglarlo, pero no debemos perder la oportunidad de poner en claro qué es y, sobre todo qué no es autogobierno.


05 mayo, 2012

Decapitados, torturados, mutilados..

Casi cada día llegan noticias de muertes en México. Las mafias de la droga se ajustan cuentas, o se las ajustan a quienes infringen sus normas. Nos llegan noticias e imágenes de personas muertas, con sus cuerpos descabezados o desmembrados, o mutilados... Qué horror, qué pena. Qué puede haber en el alma de quien realiza este tipo de actos aparte del vacío más absoluto.

El torturador aparece en todas las sociedades, en unas de manera más notoria que en otras, pero siempre está ahí, agazapado, esperando, o buscando, su oportunidad. El torturador no es un enfermo, ni un loco, es alguien que daña a sus semejantes a sabiendas de que lo hace. Qué puede haber dentro de la cabeza de una persona para poder realizar este tipo de actos. ¿Los hará por miedo?¿Puede llegar a hacerse este tipo de cosas por miedo? No lo sé, pero creo que no, que hay algo más, algo terrible... Placer.

Las ONG denuncian constantemente casos de torturas en todas partes. En las áreas menos civilizadas son, si cabe, más impúdicas. México: cadáveres colgados de un puente, cabezas en una cuneta, miembros arrancados o segados. Cómo puede llegarse a una orgía tal si no es por el gusto de hacer el mal, por el placer de causar el mayor sufrimiento posible a tus semejantes. No basta con quitarlos de la circulación con un tiro en la nuca, no. Hay que sujetarlos y concentrarse en el acto de cercenar un miembro mientras el otro grita presa de un dolor insoportable y la sangre salta a borbotones de las arterias.

Los seres humanos estamos programados para vivir, para preservar nuestra vida y para tener descendencia que perpetúe la especie. Podemos llegar a matarnos unos a otros por disputas territoriales o de otro tipo. Podemos llegar también a matar a alguien por venganza y sentir el amargo dulzor de la misma. Pero torturar por torturar, hundir un instrumento en el cuerpo de otro para hacerle sentir dolor, cortarlo en pedazos haciéndolo sentir que se le está cortando, procurarle el máximo sufrimiento solo para que sufra... Eso es algo que jamás podré comprender. Torturar es la máxima depravación posible a la que puede llegar un ser humano, si es que alguien capaz de algo así puede incluirse dentro de nuestra especie.